Trump, el giro de la política de Estados Unidos en Cuba

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunciará este viernes un nuevo cambio en su política hacia Cuba donde restringirá algunas actividades de negocio y algunos viajes de estadounidenses a la isla. 

Así, Trump no seguirá progresando en el proceso de normalización con Cuba si no hay avances democráticos como "elecciones libres" en la isla. El presidente estadounidense decidió "empezar el proceso de dejar claro al régimen de Raúl Castro que hay hitos muy específicos que van a tener que cumplir si quieren continuar con este tipo de relación".

Esos hitos incluyen la celebración de "elecciones libres" y la "liberación de prisioneros políticos", añadió la fuente, horas antes de que Trump haga pública su decisión sobre la política hacia Cuba en un discurso programado para este viernes en Miami (Florida).

Trump no planea romper las relaciones "ni deshacer los mecanismos diplomáticos que estableció su predecesor en la Casa Blanca, Barack Obama", sin embargo, tampoco pretende profundizar en el proceso de normalización si el Gobierno cubano no está dispuesto a hacer concesiones en esos temas.

"Nuestra esperanza es que el régimen cubano vea esto como una oportunidad para implementar las reformas que prometieron hace un par de años", señaló.

El gobierno de Donald Trump centra así su atención en el proceso de transición que comenzará pronto en Cuba, dado que Raúl Castro planea abandonar el poder en febrero de 2018 y en octubre de este año habrá elecciones municipales a las que algunos opositores quieren presentar candidaturas independientes.

"Vamos a tener una serie de reformas que harían muy difícil a quien sea el sucesor de Raúl Castro seguir implementando este tipo de Estado policial represivo, que está alimentado por las compañías controladas por el Ejército", afirmó la funcionaria estadounidense.

Trump pedirá este viernes a los Departamentos del Tesoro y de Comercio que "desarrollen regulaciones para prohibir las transacciones (estadounidenses) con los servicios militares, de inteligencia y de seguridad" de Cuba.

Trump también buscará "asegurarse de que se aplica estrictamente la prohibición legal" a los estadounidenses de hacer turismo en Cuba, por lo que "acabará con los viajes individuales para hacer contactos con el pueblo cubano", conocidos en inglés como "people to people travel".