Compleja mediación política y económica de Tusk entre Macron y Merkel
Compartir en:
"Last round of consultations on appointments before the start of #EUCO. Yesterday I was cautiously optimistic. Today I’m more cautious than optimistic". "Ayer era cautamente optimista. Hoy, soy más cauto que optimista", La síntesis de la situación reflejada con fidelidad por el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk.
Una situación compleja con la constitución del Parlamento Europeo el 2 de julio y la necesidad de un nuevo Consejo Europeo en un fin de junio muy apretado por la importante cumbre del Grupo de los Veinte (G20) en Osaka. En el centro del debate, las negocociaciones y las consultas tanto para el nombramiento del presidente de la Comisión Europea como del Banco Central Europeo (BCE).
Para Donald Tusk, presidente del Consejo Europeo, llegó el momento que le pone a prueba. Tiene que lograr el pacto de Angela Merkel y Emmanuel Macron.
Todos los analistas coinciden en Bruselas en el deseo del presidente francés de poner fin al protagonismo del Partido Popular Europeo (PPE). Pero a la vez reconocen que lo tendrá que pactar con la canciller alemana. En cualquier fórmula de acuerdo, el peso del eje francoalemán es realmente decisivo.
Angela Merkel podría renunciar a la candidatura de Manfred Weber. Pero tendría que conseguir otros objetivos. Pueden producirse sorpresas porque hasta el mismo Emmanuel Macron se ha referido a Angela Merkel como la mejor sucesora de Jean-Claude Juncker.
En la negociación y los debates, el llamado spizenkandidaten -que el sucesor sea el cabeza de lista de la familia política que consiga el apoyo del Parlamento Europeo y no un tapado impuesto por las capitales-. Muy importante también en estas negociaciones la búsqueda de un acuerdo sobre una agenda estratégica que ponga especial énfasis en la lucha contra el cambio climático.
Una situación compleja con la constitución del Parlamento Europeo el 2 de julio y la necesidad de un nuevo Consejo Europeo en un fin de junio muy apretado por la importante cumbre del Grupo de los Veinte (G20) en Osaka. En el centro del debate, las negocociaciones y las consultas tanto para el nombramiento del presidente de la Comisión Europea como del Banco Central Europeo (BCE).
Para Donald Tusk, presidente del Consejo Europeo, llegó el momento que le pone a prueba. Tiene que lograr el pacto de Angela Merkel y Emmanuel Macron.
Todos los analistas coinciden en Bruselas en el deseo del presidente francés de poner fin al protagonismo del Partido Popular Europeo (PPE). Pero a la vez reconocen que lo tendrá que pactar con la canciller alemana. En cualquier fórmula de acuerdo, el peso del eje francoalemán es realmente decisivo.
Angela Merkel podría renunciar a la candidatura de Manfred Weber. Pero tendría que conseguir otros objetivos. Pueden producirse sorpresas porque hasta el mismo Emmanuel Macron se ha referido a Angela Merkel como la mejor sucesora de Jean-Claude Juncker.
En la negociación y los debates, el llamado spizenkandidaten -que el sucesor sea el cabeza de lista de la familia política que consiga el apoyo del Parlamento Europeo y no un tapado impuesto por las capitales-. Muy importante también en estas negociaciones la búsqueda de un acuerdo sobre una agenda estratégica que ponga especial énfasis en la lucha contra el cambio climático.
Compartir en: